La receta sobre la cual os quiero hablar hoy, es una de esas recetas de las de toda la vida, de esas de las que cualquier madre o abuela nos han preparado cientos de veces, en mi casa desde luego se ha hecho desde que yo tengo uso de razón, y se ha hecho con todo tipo de carnes, ya sean costillas de cerdo, pollo, conejo… aunque hoy os voy a explicar cómo hacerlo con una de las carnes más comunes del mercado, es decir el cerdo, y para ser más exactos con costillas de cerdo, que si bien no es la carne más utilizada, si es una de las carnes más sabrosas y fáciles de cocinar.
La receta de costillas de cerdo al ajillo, es bastante sencilla y rápida de cocinar, lo que la hace ideal si eres principiante en la cocina, o si simplemente estas en uno de esos días, en los que no quieres complicarte mucho la vida en la cocina.
Las costillas de cerdo las podéis comprarlas enteras y trocearlas vosotros, o lo que yo os recomiendo, las podéis comprar ya troceadas para ahorraros el trabajo de hacerlo vosotros, eso sí, si las troceáis vosotros, cuidados con astillas los huesos, que luego pueden ser un fastidio si os metéis alguno en la boca, otra opción es que os las trocee el carnicero del supermercado cuando las compréis, eso ya lo tenéis que decidir vosotros.
Esta receta tan sencilla de hacer, tiene dos formas de hacerse, las cuales os voy a explicar en este mismo artículo, se puede cocinar sofriéndolo solo con el ajo, que es la receta más sencilla y está muy sabrosa.
Y la otra forma de hacerla es haciendo lo mismo, pero cuando veáis que las costillas se han dorado, añadiéndole un poco de vino blanco, el cual tendremos que dejar hervir hasta que se reduzca y pierda el alcohol, lo que dependerá de la potencia de vuestro fuego, y que aunque complica un poquito más la receta, nos dejara una salsa de vino blanco y ajo, de la que no dejareis ni una gota, pues esta tan rica que seguro que os la coméis toda mojando pan en ella.
Aunque sois vosotros los que debéis decidir que versión de las 2 hacer, o hacer las 2 y elegir la que más os gusta, que es lo que yo os recomiendo, y para que aprendáis a hacerlo os dejo la receta justo a continuación.
Ingredientes para saber cómo hacer o preparar unas costillas de cerdo al ajillo, una receta típica y tradicional de España:
- 1000 Gramos de costillas de cerdo troceadas
- 7 Dientes de ajos pelados
- 75 Mililitros de aceite de oliva virgen extra
- 1 Rama de tomillo (opcional)
- 1 Rama de romero (opcional)
- 300 Mililitros de vino blanco (opcional)
- Sal y pimienta al gusto
Pasos para saber cómo hacer o preparar unas costillas de cerdo al ajillo, una receta típica y tradicional de España:
1º Lo primero que tenemos que hacer, es trocear las costillas de cerdo con cuidado de que no se astille el hueso, sino luego estas pequeñas astillas se liberan al plato y podemos comérnoslas sin querer, otra opción es comprarlas ya troceadas o pedirle al carnicero que nos las trocee, los trozos deberán de tener un tamaño aproximado de 3 o 4 centímetros. Tras lo cual los salpimentamos al gusto y los reservamos.
2º Después, cogemos una sartén, le ponemos el aceite de oliva virgen extra y ponemos la sartén al fuego en potencia media hasta que se caliente el aceite de oliva.
3º Mientras se calienta el aceite de oliva virgen extra, cogemos los dientes de ajos, los pelamos y los cortamos por la mitad, tras lo cual y una vez el aceite de oliva virgen extra este caliente, los echamos a la sartén y los sofreímos durante unos 5 minutos hasta que estos se hayan dorado por todas las partes. Con lo que el aceite habrá cogido todo el sabor de los ajos, tras lo cual los retiramos del aceite para que no se quemen, ya que sino haría que el aceite se quedara con un sabor amargo.
4º A continuación, añadimos las costillas a la sartén junto al romero y al tomillo, sofriéndolo todo junto a fuego medio, dándoles vueltas de vez en cuando para que no se quemen. Deberemos sofreír las costillas de cerdo hasta que estas estén casi hechas y doradas por todos los lados. En caso de no querer usar el vino, tendremos que esperar a que se terminen de hacer y servirlas, en caso contrario, debemos seguir con el siguiente paso.
5º Ahora, cuando las costillas están casi hechas, quitamos el aceite de oliva sobrante de la sartén, y echamos el vino blanco y los ajos que habíamos retirado al principio, tras lo cual lo cocinaremos todo junto hasta que el vino blanco se haya reducido y el alcohol se haya evaporado, con lo que nos quedara una salsita de vino blanco y ajillo espectacular, tras lo cual ya tendremos nuestro plato listo para servir, buen provecho.
Cómo veis las costillas de cerdo al ajillo, es una receta muy sencilla y rápida de hacer, la cual podemos realizar en unos pocos pasos, espero que hayáis disfrutado con la receta y que cualquier duda u opinión no dudéis en escribírmela a través de un comentario, así como si la habéis hecho con o in el vino blanco, y que versión de las 2 preferís, el cual yo contestare en cuanto lea. A continuación os dejare unos enlaces a otras recetas muy sencillas y sabrosas que creo que pueden ser de vuestro interés, muchas gracias por vuestra visita, y espero que volváis muy pronto.