Desde pequeñito siempre me han gustado las frutas del bosque, las cuales recuerdo ir a recoger por el monte de forma silvestre en el pueblo de mi abuelo que está en Cuenca, y es que tenía la gran suerte de que crecieran por los bosques que rodeaban el pueblo de mi abuelo, donde antiguamente siempre teníamos una casa para veranear, lo que me permitió comer kilos y kilos de estos frutos durante años de forma gratuita y con su máxima calidad, ya que estos son mucho más sabrosos, no solo porque están maduros, sino porque vienen de una variedad de zarzamora silvestre, las cuales producen menos frutos pero tienen más sabor que las que se usan para producir la variedad comercial.
El caso es que esta afición por este tipo de frutos, ha hecho que ahora ya en la edad adulta me haya centrado más en este tipo de frutos para hacer mis recetas de postres que en otros frutos más comunes en mi país que es España, donde las frutas más comunes suelen ser los cítricos como el limón y la naranja, por eso veréis que en muchas de mis recetas uso arándanos, frambuesas o como hago en este caso uso moras, las cuales al contrario de lo que se cree no provienen del árbol morera, el cual si da un tipo demora blanca que no se consume, sino de la zarzamora, que es un arbusto espino que crece en climas húmedos, de ahí que las de mi pueblo crecieran cerca del rio.
Como por desgracia en la mayoría de sitios no se pueden conseguir moras silvestres, no nos queda otra que ir a comprarlas a el supermercado, aunque estas suelen estar algo verdes y acidas, por lo que he tenido que variar un poco la receta original que cree en su momento, para aportarle ese dulzor y sabor extra que han perdido las frutas del supermercado por haber sido recogidas tan temprano, además de que las moras, al igual que otros frutos del bosque suelen empezar a perder sabor a las 2 horas de haber sido recogidas, lo que sumando ambos factores explica el porqué del poco sabor de las variedades que venden en el supermercado.
Y la solución que he encontrado para que las moras sepan como si estuvieran recién cogidas de la zarzamora, es coger dichas frutas y hacerlas en mermelada, algo muy fácil y que al contrario de lo que pensareis, no tiene nada que ver con la mermelada industrial, la casera hace que la fruta con la que la hacemos, sepa como si fuera la pieza de fruta natural, pero en su momento más dulce, así que si queréis que esta receta os salga tan rica como a mí, solo tenéis que seguir todos los pasos que os pongo a continuación, que son muy poquitos y conseguiréis tener unas tartaletas de moras y nata geniales para días tan señalados como el día de Navidad donde vuestros invitados quedaran impresionados con ellas.
Ingredientes para saber cómo hacer o preparar tartaletas o volovanes de moras y nata:
- Volovanes o tartaletas
- Nata para montar y azúcar
- Mermelada casera de moras.
Pasos para saber cómo hacer o preparar tartaletas o volovanes de moras y nata:
1º Primero debemos hacer la mermelada casera y enfriarla, es algo que se hace de forma relativamente sencillo, y para que aprendáis como hacerlo os dejo a continuación un enlace donde os lo especifico, solo que en esta receta en vez de arándanos como pone en los pasos del enlace usaremos moras, pero lo demás es exactamente igual: Como hacer mermelada de moras.
2º Montamos la nata con la que rellenaremos los volovanes o tartaletas, quiero recordaros, que para montar la nata liquida debe estar muy fría, y que hay que añadir el azúcar al gusto antes de montarla, aunque se puede añadir mientras la montamos si vemos que no está todo lo dulce que querríamos.
3º Después ponemos nata dentro de los volovanes, ayudándonos para ello con una cuchara mediana, de las que solemos usar para remover el café con leche o una gran taza de té.
4º Una hayamos rellenados con nata los volovanes, les colocamos un poco de la mermelada que hemos preparado y enfriado en el paso 1.
5º Y por último, podéis poner una mora natural encima de cada tartaleta, lo que le aportara sabor y vistosidad.
Y hasta aquí la receta de tartaletas de nata y moras, que siempre hacemos en mi casa los días de navidad, espero que os haya gustado tanto como me gustan a mí, si finalmente la hacéis no dudéis en comentarme cualquier duda u opinión a través de un comentario, que yo os contestare en cuanto lo lea. A continuación os dejare otros enlaces de otras recetas que creo que os pueden interesar, muchas gracias por vuestra visita y espero que volváis muy pronto.
Tartaletas de frambuesa y nata
Tarta de queso con arándanos o cheesecake (Típica de EE. UU)